Instalación de Sitio específico en Zafarrancho, un sótano devenido taller de artistas en Buenos Aires. La instalación consta de tres fotografías de humedales de la Argentina, en marcos de madera rústica, colgadas de la estructura. Intervención de material vegetal relacionado con las imágenes humedecido, y ostinato de sonido de agua permanente, 2015
Humectaria es una intervención de sitio específico en Zafarrancho, el sótano de un edificio devenido taller de artistas luego del rescate después de una inundación, que a veces abre sus puertas a otros para realizar muestras. Lugar sin luz natural, con olor a humedad, y caños a la vista debajo de la losa. Tres enormes fotos de humedales en marcos rústicos, de los cuales brotaba la naturaleza misma, colgaban en los ángulos del espacio. El sonido del agua fluía cual ostinato permanente, casi como la evidencia de aguas subterráneas.
Humectaria, por Rita Simoni, Mayo de 2015.
Impregnada
Humectaria Lugares húmedos.
Buenos Aires y sus arroyos profanados por el delirio del cemento.
El Delta del Paraná, con sus tentáculos infinitos herederos de otras selvas tropicales.
La Yunga tucumana, productora de nieblas en el corazón de la montaña.
Imágenes que son memoria del paisaje. Captura escurridiza que intenta eternizar la intensidad de la experiencia.
Paisaje que es estado real e imaginario.
Desplazado a otro sitio, que al impregnarse de inundación devino arte. Humedad, humedales, humores.
Todo sucede allí abajo. Allí el sonido es del chapotear en el barro.
Al internarnos a ciegas en las entrañas de la tierra, aparecemos circulando a la deriva por territorios inciertos. Allí los sentidos y emociones parecen amplificar su potencia. Lo que brota trasciende el límite, se desparrama y extiende por el espacio circundante, más allá de la voluntad humana. Y crece.
Humectaria, por María Carolina Baulo, Lic. Historia del Arte y curadora, 2015